Activista
No me interesa a qué te dedicas. Quiero saber lo que anhelas y si te atreves a soñar con satisfacer el anhelo de tu corazón.
Los Activistas (ENFP) son verdaderos espíritus libres: extrovertidos, abiertos de corazón y de mente abierta. Con su enfoque animado y optimista de la vida, destacan entre la multitud. Pero aunque pueden ser el alma de la fiesta, a los Activistas no sólo les importa pasárselo bien. Este tipo de personalidad está muy arraigada, al igual que su anhelo de establecer conexiones significativas y emocionales con otras personas.
La Magia del Día a Día
Simpáticos y extrovertidos, los Activistas se dedican a enriquecer sus relaciones y su vida social. Pero bajo su exterior sociable y despreocupado, también tienen una vida interior rica y vibrante. Sin una buena dosis de imaginación, creatividad y curiosidad, un Activista no sería un Activista.
A su manera, los Activistas pueden ser bastante introspectivos. No pueden evitar reflexionar sobre el significado más profundo de la vida, incluso cuando deberían estar prestando atención a otra cosa. Estas personalidades creen que todo -y todos- está conectado, y viven por los destellos de comprensión que pueden obtener de estas conexiones.
Cuando algo despierta su imaginación, los Activistas pueden mostrar un entusiasmo casi contagioso. Estas personalidades irradian una energía positiva que atrae a otras personas, y es posible que sus compañeros los consideren líderes o gurús. Sin embargo, una vez que desaparece la inspiración inicial, los Activistas pueden tener dificultades con la autodisciplina y la constancia, y perder fuelle en proyectos que antes significaban mucho para ellos.
Buscar Felicidad
Los Activistas son la prueba de que buscar las alegrías y los placeres de la vida no es lo mismo que ser superficial. En un abrir y cerrar de ojos, las personas con este tipo de personalidad pueden pasar de idealistas apasionados a figuras despreocupadas en la pista de baile.
Incluso en los momentos de diversión, los Activistas quieren conectar emocionalmente con los demás. Pocas cosas importan más a este tipo de personalidad que mantener conversaciones auténticas y sinceras con las personas a las que aprecian. Los Activistas creen que todo el mundo merece expresar sus sentimientos, y su empatía y calidez crean espacios en los que incluso los espíritus más tímidos pueden sentirse cómodos abriéndose.
Sin embargo, las personas con este tipo de personalidad deben tener cuidado. Su intuición puede llevarles a interpretar demasiado las acciones y comportamientos de los demás. En lugar de limitarse a pedir explicaciones, los Activistas pueden acabar descifrando los deseos o intenciones de los demás. Este tipo de estrés social es lo que quita el sueño a los Activistas centrados en la armonía.
Los Activistas pasarán mucho tiempo explorando diferentes relaciones, sentimientos e ideas antes de encontrar el camino correcto para sus vidas. Pero cuando finalmente encuentran su camino, su imaginación, empatía y coraje pueden iluminar no sólo sus propias vidas, sino también el mundo que les rodea.